viernes, octubre 30, 2009

La Declaración de Praga: una nueva conciencia universal

La Declaración de Praga debe ser un documento fundante. Tanto como la Declaración de los Derechos del Hombre. O la sentencia del Juicio de Nuremberg.
No puede fundarse una democracia universal sin la expresa condena, persecución y represión de los asesinos masivos, sean estos nazis, comunistas o nacionalistas serbios o croatas.
Los criminales nazis y los nacionalistas han sido identificados, perseguidos y juzgados.
Nada se sabe, en cambio, de los criminales comunistas. Un velo de silencio o ignorancia protege a Lenin y Trotsky (Stalin fue acusado por el propio Kruschev, lo cual lo expuso a la mirada del mundo), Mao, Pol Pot, Kim il Sung, Fidel Castro, Ceasescu. Nada sabemos de los ejecutores de las politicas de represión: los coroneles, los espias, los guardiacarceles, los grupos de tareas, los pelotones de fusilamiento, los torturadores de la KGB o la Stasi. No hay listas de criminales búlgaros o rumanos o húngaros buscados para que se haga Justicia.
Se prohibe el uso de símbolos nazis, pero no hay ni una sola ley que prohiba el uso de la hoz y el martillo, o la bandera roja. Los partidos de ultraderecha no pueden llamarse "Partido Nazi Argentino", pero nadie se escandaliza del Partido Comunista Argentino.
Los asesinados por los nazis no son "eticamente" mejores que los asesinados por los comunistas. Ambos son inocentes, pero los cerca de cien millones de eliminados por el comunismo, de 1917 en adelante, padecen de un olvido infamante.Aun hoy se descubren tumbas colectivas en Rusia, con centenares cadáveres apilados que no son reclamados por nadie. Es tiempo de reparar ese olvido.
Hasta hace poco, incluso, no era de buen gusto referirse a los "crímenes comunistas", como si esa frase denunciara complicidad con la CIA o con el Senador McCarthy. Se los denominaba "crímenes stalinistas", como si el señor Pol Pot o el señor Fidel Castro fueran empleados de Stalin. Los crímenes comunistas ocurrieron antes, durante y despues del reinado de Stalin. Y ocurrieron no solo en la Unión Soviética sino tambien en China, Camboya, Corea del Norte, Hungría, Rumania, Bulgaria, Yugoeslavia,Polonia, Alemania del Este, Cuba, Congo, Angola. Y no ocurrieron solo a manos de Estados Comunistas, sino de grupos guerrilleros comunistas como en Colombia, Perú, Bolivia, Argentina, Uruguay.
Nada excusa ya el silencio. Desde la apertura de los archivos, con posterioridad a 1989, se sabe con minuciosa precisión quien mató, a cuantos, dónde y cómo. Ya nadie puede creer que hubo millones de "enemigos del pueblo" que merecieron ese destino. La verdad existe y está a un toque, en la Web.
Es tiempo, entonces, de leer la Declaración de Praga en todas las escuelas, incorporarla a la currícula educativa, debatir públicamente sus afirmaciones.
Es tiempo de abrir un debate mundial, como pide la Declaración, sobre la verdad,la memoria y la justicia de los crímenes comunistas, y sobre la inexistencia de legislaciones que limiten y sancionen el uso de los símbolos de ese horror.

No hay comentarios.:

INTERNET LIBRE

INTERNET LIBRE
LIBRE ACCESO A LA WEB EN CUBA!