Obtener el 51% está bueno. Alfonsín obtuvo el 52%, Menem el 51%, como de la Rúa. Está bueno, es un gran triunfo. Pero nada más.
Otro 49% de los electores no lo votaron, eligieron otras opciones. ¿Qué se hace, en un Proyecto Fundante Socialista como el que lidera Correa con ese remiso 49%? Esa es la pregunta del millón.
O lo ignora, o trata de seducirlo. Ignorar a la mitad menos uno es imposible, en términos de gobernabilidad. Intentar seducirlo parece imposible, ya que Correa tuvo tres años para hacerlo y no lo logró.
¿Entonces?
El socialismo no tene respuestas a este dilema. El socialismo trabaja bajo el escenario de UN pueblo unido. No admite íntimamente la disidencia, la cual le parece algo inexplicable, producto de alguna conjura imperial o del "colonialismo mental".
Con ese 49% tendrá que lidiar Correa. Veremos como lo hace: si a la manera patoteril de su amigo Chávez o inventa un estilo distinto, como pareciera, por su pinta de chico bueno, que puede ser su proyecto.
2 comentarios:
Mmmmhhh, no sé. No sé si hay progres buenos, cuando considerás que el que no piensa como vos es un traidor enemigo "del pueblo".
JL
Justamente: este resultado lo obliga a optar: o la variante "el enemigo del pueblo" o la variante" consenso democratico". Supongo que elegirá la primera...pero ¿podrá sostenerla?
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